
Cuatro años más tarde, coincidiendo con el aniversario de este suceso, ETA ha vuelto a hacer lo único que sabe hacer desde la cobardía que ya la caracteriza: atacar un centro de trabajadores en plena hora punta, justo a la hora de entrada. Como cobardes y vagos que son, no se meten a volar la Moncloa o el Palacio Real. Eso sería muy complicado para ellos. Es mejor ir a por objetivos más sencillos, contra la gente de a pie, la gente que a fin de cuentas mueve el país.
De hecho su objetivo sigue siendo Ifema, pero nunca llegan a acercarse a más de 200 metros. Como se puede ver, siempre ponen las bombas en los alrededores.


Esto, unido a la pequeña nevada de hace unos días, en la que los servicios de emergencia y protección civil se quedaron atónitos mirándose unos a otros con cara extrañada sin saber qué hacer ante el raro y espectacular fenómeno que supone el agua en forma de pequeños cristales de hielo llamados comunmente nieve, me llevan a pensar que nuestros servicios de protección sólo funcionan bien en tiempos de calma y normalidad, pero que no están en absoluto preparados para cosas que se salen de lo ordinario.
Cada vez estoy más convencido de que no ocurren más cosas unicamente por pura casualidad.

¿Qué ha cambiado en 4 años? A mi entender, no ha cambiado absolutamente nada en materia de política y antiterrorismo. Sigue estando el mismo veleta que acababa de ser elegido en el 2005, veleta no porque cambie de parecer arbitrariamente (que también lo hace: antes y después) , sino porque a este señor, en su afán de querer contentar a todo el pueblo por igual, no le importa decir que sí a todo, quitar penas y reducir condenas. Vivimos en el País del Lacasito, donde todo el mundo ríe, todo el mundo hace lo que quiere y todo el mundo canta y baila. Lo que pase mañana ¿a quien le importa?
Pues "Mañana" ya ha llegado.

No hay comentarios:
Publicar un comentario