Los que me conocéis y habéis hablado conmigo de la "presunta crisis" en los últimos meses habréis comprobado que siempre defiendo la postura de que no existía ninguna crisis real a nivel nacional y que todo no es más que un efecto bola-de-nieve a fuerza de meter miedo e insistir desde los medios de comunicación. La gente que perdió su empleo durante la primera etapa de la mal llamada crisis fue mínima y pertenecía exclusivamente al sector de la construcción (esto no tiene nada que ver con ninguna crisis, sino con una regulación del mercado donde la oferta superaba con creces a la demanda en el tema de la construcción). Posteriormente a esta etapa real, donde sí hubo despidos, y que duró el verano de 2008, llegó un período donde la prensa hablaba de crisis no ya cada día, sino en cada una de las secciones (principalmente los diarios gratuitos o más influenciados por la publicidad, o los más sensacionalistas).